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Acis y Galatea


Acis y Galatea


Acis y Galatea son personajes de la mitología griega, asociados posteriormente en las Metamorfosis de Ovidio. El episodio narra la historia de amor entre el mortal Acis y Galatea, una nereida (ninfa marina). Cuando el celoso cíclope Polifemo mata a Acis, Galatea transforma a su amante en un inmortal espíritu del río. El episodio sirvió de tema de poemas, óperas, pinturas y estatuas en el Renacimiento y posteriormente.

Mitología

Galathea[1]​ o Galatea (en griego antiguo: Γαλάτεια; «la que es blanca como la leche»[2]​), la «gloriosa» y «hermosa» hija de Nereo (Anciano del Mar) y de la oceánide Doris, es una ninfa marina, mencionada antiguamente en la obra de Homero y de Hesíodo, en las que se la describe como la más hermosa y amada de las 50 nereidas.[3]​ Vivía en el mar y despertó el amor de un pretendiente altamente improbable, el cíclope siciliano Polifemo.

En las Metamorfosis de Ovidio, Galatea aparece como la amada de Acis, el hijo de Fauno y la náyade Simetis, hija del río Simeto. Un día, mientras Galatea yacía junto al mar con su amado, Polifemo los vio. Celoso, arrancó una enorme roca de la ladera del monte Etna y se la arrojó al joven. Aunque Acis trató de huir, la enorme roca lo aplastó y lo mató. Galatea entonces convirtió su sangre en aguas espumosas al brotar de debajo de la roca, creando así la corriente en el Etna que llevó su nombre, el río siciliano Acis. Galatea convirtió a su amante mismo en el dios cornudo del arroyo. Acis mantuvo sus rasgos originales excepto que ahora era más grande y su rostro ahora era de un color azul profundo.[4][5][6]

Esta versión de la historia no aparece en ningún otro lugar previo a la obra de Ovidio y posiblemente podría haber sido una ficción creada por el poeta, «sugerido por la forma en que el riachuelo brota de debajo de una roca».[7]​ Según el académico griego Ateneo, la historia fue creada por primera vez por Filóxeno de Citera como una sátira política contra el tirano siciliano Dionisio I de Siracusa, cuya concubina favorita, Galatea, llevaba el mismo nombre de la ninfa.[8]​ Otros afirman que la historia se creó para explicar la presencia de un santuario dedicado a Galatea en el monte Etna.[9]

Según una tradición posterior, Galatea cedió eventualmente a las pretensiones de Polifemo. El hijo que tuvieron, Galas o Galates, habría de ser el antepasado de los galos.[10]​ El historiador helenístico Timeo, de origen siciliano, describió a Galates como hijo de Polifemo y Galateia.[11]

Galatea junto con Doto y Panopea, escoltaron a su hermana Tetis fuera del mar a su boda con Peleo.[12]​ En la Ilíada de Homero, Galatea y sus hermanas se le aparecen a Tetis cuando ésta llora en simpatía por el dolor de Aquiles por la muerte de su amigo Patroclo.[13]

Referencias culturales

Literarias y operísticas

Durante las épocas del Renacimiento y el Barroco la historia volvió a surgir como tema popular. En España, Luis de Góngora y Argote escribió el admirado poema narrativo Fábula de Polifemo y Galatea, publicado en 1627. Se destaca particularmente por su representación del paisaje y por su sensual descripción del amor entre Acis y Galatea.[14]​ Fue escrito en homenaje a una narración homónima anterior y más breve de Luis Carrillo y Sotomayor (1611).[15]​ La historia también apareció en versión operística en la muy popular zarzuela de Antonio de Literes Carrió (1708). La atmósfera en ésta es más ligera y animada con la inclusión de los payasos Momo y Tisbe.

En Francia, Jean-Baptiste Lully dedicó a su amada su ópera Acis et Galatée (1686).[16]​ Descrita por él como una obra pastoral-heroica, se centra en el triángulo amoroso entre los tres personajes principales: Acis, Galatea y Polifemo da muerte a Acis por celos, pero Neptuno lo revive y lo convierte en un río. En Italia, la ópera en un acto Polifemo de Giovanni Bononcini apareció en 1703.[17]

Poco tiempo después Georg Friedrich Händel estaba trabajando en ese país y compuso la cantata Aci, Galatea e Polifemo (1708), poniendo tanto énfasis en la parte de Polifemo como en la de la pareja de amantes. Escrita en italiano, el profundo solo en bajo de Polifemo Fra l'ombre e gl'orrori (De horribles sombras) establece su carácter desde el inicio.[18]​ Cuando Händel se mudó a Inglaterra, le dio a la historia un nuevo tratamiento en su ópera pastoral Acis y Galatea con un libreto en inglés escrito por John Gay.[19]​ Compuesta inicialmente en 1718, la obra pasó por muchas revisiones y Mozart y Mendelssohn le dieron posteriormente orquestaciones actualizadas. Como obra pastoral en la que Polifemo juega solo un papel menor, si bien decisivo, la obra se centra principalmente en los amantes.

Durante su estancia en Londres, Nicola Porpora compuso la ópera Polifemo, en la que aparecen Acis y Galatea, así como el encuentro de aquel con Polifemo. Posteriormente en ese siglo, en Austria, Joseph Haydn compuso Acide e Galatea (1763).[20]​ Diseñada para una boda imperial, tuvo un final más feliz centrado en la escena de transformación tras la muerte de Acis cuando la pareja se declara amor eterno.[21]

Pintura

Pinturas en las que aparecen Acis y Galatea se pueden agrupar de acuerdo con sus temas. De manera más notable, la historia tiene lugar dentro de un paisaje pastoral en el que las figuras son casi incidentales. Esto es particularmente obvio en el Paisaje con Polifemo de Nicolas Poussin (1649) (Museo del Hermitage) y en el paisaje costero de Claude Lorrain (Dresde) de 1657, en donde en amos casos los amantes juegan un papel menor en el primer plano. En una pintura anterior de Poussin (Galería Nacional de Irlanda, 1630) la pareja es una de varias figuras abrazadas en primer plano, protegidas de la vista de Polifemo, que toca su flauta más arriba en la ladera.

En todas estas pinturas, Polifemo aparece en algún lugar en el fondo, pero muchas otras muestran a Galatea sola, como en la pintura de ella hecha por Perin del Vaga, en la que es arrastrada por bestias marinas sobre las olas mientras monta sobre una concha marina. No obstante, generalmente la ninfa es llevada a través del mar por asistentas adoradoras en pinturas que generalmente son tituladas como El triunfo de Galatea, de las cuales la más famosa es la de Rafael. En general, estas obras siguen la descripción del siglo III de una pintura de este tipo dada por Filóstrato el Joven en sus Imágenes:[22]

En aquellos casos en los que el rechazado Polifemo aparece en algún lugar de la costa, la división entre ellos se ve enfatizada al identificárseles con sus respectivos elementos, mar y tierra. Ejemplos típicos de esto fueron los pintados por Francois Perrier,Giovanni Lanfranco[23]​ o Jean-Baptiste van Loo.

Sensuales retratos de los amantes abrazándose en un paisaje fueron hechos especialmente por pintores franceses, como los de Charles de La Fosse (c. 1700), Jean-François de Troy[24]​ o Alexandre Charles Guillemot (1827).[25]​ En estas pinturas, Polifemo acecha en el fondo y en el caso del de De Troy, su presencia claramente angustia a Galatea. Otros ejemplos franceses de obras de Antoine Jean Gros (1833)[26]​ y Édouard Zier (1877) ilustran a los amantes escondiéndose en una cueva y mirándolo con ansiedad.

Estas pinturas anticipan el momento trágico en que Polifemo se cierne amenazadoramente sobre la pareja, habiendo descubierto la verdad que han intentado ocultar. La amenaza es igualmente aparente en la perspectiva suavemente delineada de Jean-Francois de Troy, del siglo XVIII,[27]​ así como en la pintura cuasisurrealista de Odilon Redon de 1900. La atmósfera inquietante en estas obras sugiere la acción violenta que está por ocurrir. Esto se había retratado en pinturas previas de Polifemo arrojando una piedra sobre los amantes que huyen, como por ejemplo en las de Annibale Carracci,[28]​ Auger Lucas[29]​ y Charles-André van Loo.[30]

Escultura

Estatuas de Galatea, a veces acompañada por Acis, empezaron a hacerse en Europa a partir del siglo XVII. Existe una imaginativa descripción de una fuente que incorpora a los dos personajes en la novela en latín Argenis de John Barclay, que data de 1621:

Menos ingeniosa es una estatua real junto a un estanque en los jardines públicos de Acireale, la ciudad siciliana en la que se supone que tuvo lugar la transformación de Acis. Acias yace bajo la roca que le ha causado la muerte, mientras Galatea se arrodilla a un lado, con un brazo levantado al cielo en súplica.

Escultores franceses también han sido responsables de algunas estatuas memorables. Un par de ellas, de Jean-Baptiste Tuby, se encuentran en el Bosquet des Dômes en los jardines de Versalles. Acis está apoyado en una roca, tocando casualmente la flauta, mientras Galatea se le acerca semidesnuda y con las manos levantadas en gesto de sorpresa (1667-1675). Un gesto similar se aprecia en la estatua de Galatea en la fuente que se encuentra a la derecha de la gran escalera en el Château de Chantilly. Los amantes aparecen juntos como parte de la Fuente de Medici en los Jardines de Luxemburgo en París. Esculpida por Auguste Ottin en 1866, las estatuas de mármol se abrazan dentro de una gruta mientras que sobre ellos se inclina un enorme Polifemo en bronce desgastado, mirándolos celoso.

Muchas otras estatuas muestran a Galatea sola, pero hay en esto una complicación. Algún tiempo después del Renacimiento, el mismo nombre se le empezó a dar también a la estatua animada de la leyenda de Pigmalión, y por tanto, es necesario distinguir entre representaciones de ésta y las de Galatea la ninfa. Una señal para diferenciarlas es la dada en la introducción de las características mencionadas en la descripción de la ninfa hecha por Filóstrato que se cita antes. Estos rasgos incluyen una mano levantada y que sostiene un ondulante paño, imágenes marinas, incluyendo conchas, delfines y tritones, y a menudo el hecho de que la estatua esté incorporada a una fuente. En la obra de Gabriel de Grupello en el parque del castillo de Schwetzingen, el tritón a los pies de Galatea sostiene una guirnalda hilada de conchas y perlas. La Galatea en los terrenos del Tsárskoye Seló en Rusia tiene perlas marinas en su cabello. Hay también una estatua de Galatea de Nicola Michetti que forma parte de la cascada del Palacio Peterhof en San Petersburgo.

En la fuente del siglo XVIII en la Villa Borromeo Visconti Litta en Milán, la ninfa aparece reclinada sobre una gran concha guiada por tritones. En la estatua del escultor italiano del siglo XIX Leopoldo Ansiglioni (1832–1894), se reclina sobre el lomo de un delfín. Hay dos versiones de ésta, una en el centro de un estanque de peces en la Casa Este de los Jardines Invernales de la Universidad de Greenwich,[32]​ en Londres, y una copia posterior instalada en el Castillo Hearst en San Simeón, California.[33]​ En ésta, uno de los brazos doblados hacia atrás para sostenerle la cabeza aparece rodeado por la cola del delfín. Asimismo, hay una fuente alemana, ahora instalada en Karlsruhe, hecha por Karl Friedrich Moest y en la que Galatea se sienta en el lomo de un tritón. Sobre su cabeza equilibra el enorme caparazón del que brota el agua. Otra estatua se erigió a la cabeza de una cascada impresionante en la Eugenplatz de Stuttgart.[34]​ Una obra de Otto Rieth (1858-1911) que data de 1890, muestra a la ninfa coronada de algas y surgiendo sobre un delfín y cupidos jóvenes que juegan a sus pies.

En las artes aplicadas, representaciones tridimensionales del tema del triunfo de Rafael eran incorporadas a menudo a artefactos para su uso aristocrático y eran pintadas sobre cerámica de mayólica.

Notas

Lecturas adicionales

  • Aken, Dr. A.R.A. van. (1961). Elseviers Mythologische Encyclopedie. Amsterdam: Elsevier.
  • Bartelink, Dr. G.J.M. (1988). Prisma van de mythologie. Utrecht: Het Spectrum.
  • Cooper, J.C., ed. (1997). Brewer's Book of Myth and Legend. Oxford: Helicon Publishing Ltd.}

Enlaces externos

Collection James Bond 007

Text submitted to CC-BY-SA license. Source: Acis y Galatea by Wikipedia (Historical)